NOTICIAS

Somos Tigres

Por Emilio Rosico, consultor de PwC en Barcelona

El otro día me hablaron de un vídeo en el que se ve a un tigre de Bengala, que es uno de los depredadores más bellos y poderosos de la tierra, intentando atrapar una gacela. Sobre las fascinantes imágenes, un dato: el tigre falla en nueve de cada diez ataques que realiza. El vídeo recrea, con un potente simbolismo, la actividad de cualquier emprendedor, que por muy ágil y musculoso que sea necesita muchos intentos hasta cobrar la pieza.

Viene esto a cuento porque el otro día recibí información sobre un proyecto de emprendimiento universitario que en 2011 tuve la oportunidad de tutelar, junto a Alejandro Luqui, en un programa de voluntariado desarrollado porla Fundación JuniorAchievement, que tiene un acuerdo de colaboración con PwC y que hace una labor muy interesante. El proyecto, basado en planes de actividad física para promover la salud,  se llamaba Fresh Health y llegó a representar ala Universidad Europeade Madrid en la competición interuniversitaria del Graduate Programme de 2011, aunque por lo que he podido saber después no acabó de materializarse. La empresa no cuajó, pero aquello fue el germen de posteriores proyectos, también relacionados con la actividad física, que ahora están en fase de desarrollo.

Me hace ilusión saber que mi entonces modesta aportación, que básicamente consistió en enfocar el plan de negocio y sobre todo en ayudarles a vender la idea,  ha podido servir de algo a unos jóvenes ilusionados por montar su propia empresa. A ellos les digo hoy que no se desanimen. Que es verdad que las cosas están chungas, pero que todos somos tigres de Bengala y que hay que perseverar en el intento. Gacelas hay muchas en la sabana.

El emprendimiento es, además, una de las pocas opciones razonables que un joven universitario tiene de encontrar trabajo. Con tasas de paro para los menores de 25 años que superan el 50%, crear una empresa es una vía de escape para los muchos talentos jóvenes que tenemos en España.  Seguramente, no saldrá a la primera, pero ya se sabe que cuando te equivocas muchas veces te acabas equivocando mejor.