Lleva más de 7 años vinculado a Junior Achievement. Gracias al programa de miniempresas, creó su primer negocio junto a sus compañeros de clase y desde entonces no ha tenido freno. El espíritu emprendedor entró en sus venas y hoy dirige Tinytien, una plataforma de comercio electrónico con la que ha ganado multitud de galardones desde su creación. El último reconocimiento viene de Europa, finalista de los Premios Amcham, su caso es una historia de éxito.
Lo primero de todo… ¡Enhorabuena! Premio a la Mejor Idea Innovadora ecommerce por la escuela digital IEBS 2013, ganador también de los Premios Emprendering 2013 y ahora segundo finalista de los Premios Amcham de la Cámara de Comercio de EE.UU en la Unión Europea… ¿Qué significa esto para ti?
Como otros galardones que hemos conseguido, este premio significa reconocimiento. Un reconocimiento, principalmente, al trabajo que realizas, porque emprendiendo no tienes un jefe que te diga “muy bien hecho”, sino que es algo que ves día a día en tus actos. Cuando ese reconocimiento viene de fuera y te lo dan otros, te anima a seguir adelante y te hace pensar que las cosas se están haciendo bien.
Llevas más de 7 años vinculado a esta organización… ¿Cuál fue tu primer contacto con JA?,
En 2007, cuando realicé el programa de miniempresas en el último año de instituto. ¡Madre mía!... Y parece que fue ayer. Gracias a ello puedo decir que a los 18 años monté mi primera empresa junto a mis compañeros de clase. Vendíamos pulseras hechas a mano y “joyeros” a base de envases reciclados. Nos dijeron que teníamos que vender algo que hiciéramos con nuestras propias manos y así fue.
¿Cómo resultó la experiencia?
¡Increíble! Yo tenía más o menos claro que mi vida estaría ligada a este mundo, pero gracias a ese programa me acabé de decidir. Me encantó ver desde dentro las necesidades de organización de una empresa y también la importancia de la motivación.
¿Te cambió en algo?, ¿qué aprendiste?
Más que el programa, con el que aprendí mucho, lo que realmente me cambió fue el hecho de conocer a Junior Achievement. Desde ese momento mi carrera profesional y personal ha ido ligada a la Fundación y, hoy en día, no entendería mi vida sin esta organización. Gracias a vosotros aprendí lo importante que es rodearte de gente que sepa hacer cosas y que quiera hacer cosas.
Desde entonces sigues trabajando con la fundación dando charlas motivadoras a profesores y alumnos, haces de jurado en las finales españolas de miniempresas y mantienes también un estrecho contacto con la organización a nivel europeo… Pero llega un momento en que te decides a emprender, ¿cómo y cuándo surge el proyecto de Tinytien?
Jorge, mi socio, y yo, lanzamos un primer proyecto que no funcionó, fracasamos y aprendimos, pero nos sirvió para darnos cuenta de las cosas que se habían hecho mal. Entonces decidimos realizar un estudio de mercado previo, donde vimos que tinytien tenía hueco en el mercado. Ahí descubrimos que había mucha gente que demandaba una solución sencilla y a bajo coste para vender en internet sus productos únicos.
¿Por qué te decidiste a dar este paso?
Porque era el momento, sin más. Sin pensárselo demasiado y sin pensárselo demasiado poco.
¿Cuáles han sido vuestros logros hasta la fecha?
El mayor logro es que alguien pague por algo que tú has hecho, y es que un emprendedor crea valor, crea dinero. Ya no es tu padre el que te da la paga, ni JA el que te paga el sueldo, sino que de repente tú “creas” tu propio dinero.
Aunque otro gran logro es darte cuenta de cómo alguien que solo ha invertido 69 euros en una tienda online factura miles de euros gracias a tu herramienta.
Seguro que ya tienes más proyectos en mente…
¡Prefiero no contestar en público! (risas). Siempre hay proyectos en mente, si te paras, mueres.
¿Es cierto que el emprendimiento “engancha”?
No sé si engancha o no, lo que sé es que si tuviera que trabajar por cuenta ajena, para un tercero, seguramente me aburriría. Lo mejor de emprender (aunque a veces es duro), es la libertad: de horarios, de rutinas, de determinar qué tipo de empresa quieres ser...
¿Se nace o se aprende a ser emprendedor?
Ni uno ni lo otro. No hay excusa para no hacerlo o para hacerlo. Soy defensor de que todo el mundo no tiene por qué estudiar una carrera ni tampoco por qué ser emprendedor. En el mundo necesitamos todo tipo de perfiles y todo tipo de personas, lo importante es que encuentres tu lugar.
¿Qué te ha aportado Junior Achievement?, ¿crees que habrías despertado el mismo espíritu emprendedor sin haber conocido la fundación?
Me ha aportado experiencia y contactos. La experiencia lo es todo, todo el mundo puede leer libros y estudiar manuales, pero no todo el mundo “sabe hacer”. Además, los contactos también son esenciales, porque tu empresa y tú vales lo que vale tu red de contactos. Y eso es así porque cuando los recursos escasean necesitas de la mano de todos para sacar adelante tu idea y tu proyecto.
¿Cuáles son tus metas?
Ser feliz… Y emprendiendo. Y, de momento, lo soy.
En lo que respecta a los jóvenes, hablamos de las generaciones mejor preparadas, pero con mayor tasa de paro… ¿Qué consejo le darías?
Una cosa es que estén “muy preparadas” y otra que estén “mejor preparadas”. Creo que hay mucha gente que viene muy bien preparada y otras que creen que lo están, pero… ¿Saben afrontar cambios de manera rápida?, ¿saben comunicarse con equipos de trabajo de varias culturas?, ¿saben programar?, ¿saben idiomas?, ¿saben hacerse valer?, ¿saben cuáles son sus objetivos?, ¿están dispuestos a afrontar que lo que han estudiado hasta ahora no les ha servido ni les servirá de nada en la vida?...
Les diría que no se relajen, que ganen experiencia y que aprendan a programar. Que no echen la culpa a un sistema educativo obsoleto o al paro. Que busquen cómo ganarse la vida siendo felices (y haciendo felices a los demás).